sábado, 19 de marzo de 2011

10 Puntos para un Frente Progresista en Rojas

A las mujeres y hombres, niñas y niños, a todas y todos los adolescentes y jóvenes del distrito de Rojas, les dejamos los 10 puntos programáticos para armar un Frente Progresista en Rojas, que no son más que 10 propuestas.


A 29 años de la recuperación de la vida democrática, queda en evidencia que este modelo de democracia burguesa, entendida como la elección de autoridades mediante el voto popular cada dos o cuatro años no da respuestas a las demandas de la población. Se hace necesario formas de democracia participativa, de mayor proximidad con la gente que convoque a todos para ir delineando las políticas públicas que se llevarán adelante no en los próximos meses sino en los próximos años.

Esta crisis no se debe, sólo a la ineficiencia en el manejo de la cosa pública de los gobiernos de turno, sino fundamentalmente porque el actual modelo de municipio de la provincia de Buenos Aires no sirve a los propósitos de mayor participación, que día a día reclama gran parte de la población.

Entonces se trata, no de administrar mejor el viejo modelo, sino de elaborar las propuestas necesarias para ir elaborando un proyecto alternativo de municipio con mayor participación, inclusión social, cuidado del medio ambiente, descentralización y transparencia, que pase por trasladar parte del poder real que ejercen las autoridades municipales hacia el pueblo, construyendo una nueva ciudadanía plena de responsabilidades y de derechos que nos lleven a construir el municipio que autoridades, partidos políticos y sociedad civil acuerden trabajando en la búsqueda de los consensos requeridos para este tipo de emprendimientos.

En este contexto el Centro Socialista y la Juventud Socialista de Rojas aportan diez puntos programáticos, que pone a consideración de la ciudadanía y de los partidos políticos en el orden local para iniciar un debate que nos conduzcan hacia una democracia de nuevas bases en donde la participación y la proximidad con los vecinos sean sus ejes fundamentales; y así poder construir un Programa de Gobierno para ROJAS.

1.- ELABORACIÓN DEL PLAN ESTRATÉGICO MUNICIPAL
Mediante el cual, se elabore un diagnóstico sobre nuestro municipio y se estudien cuales son los proyectos necesarios para un mejor desenvolvimiento del mismo.

2.- PRESUPUESTO PARTICIPATIVO
Por el cual los vecinos deciden que obras quieren para cada barrio, destinándose una parte del presupuesto municipal a tal efecto. La implementación del Presupuesto Participativo Ambiental es una herramienta, para incorporar previamente el debate y la aprobación de las políticas ambientales por parte de las vecinas y los vecinos de cada barrio, que son los que mejor conocen los problemas ambientales.

3.- DESCENTRALIZACIÓN MUNICIPAL
La descentralización municipal es una de las principales herramientas para acercar la administración municipal a la gente.
La descentralización que proponemos no es el mero traspaso de algunas tareas a las delegaciones, sino que implica un nuevo concepto de proximidad con los vecinos en administración pública. De esta forma los vecinos encuentran en cada delegación un mini municipio que satisface la mayor parte de los requerimientos en distintas áreas como trámites, servicios, pequeñas y medianas obras de infraestructura, etc.
Consulta Popular No Vinculante para que las ciudadanas y ciudadanos de cada pueblo del distrito de Rojas proponga a su Delegado Municipal.

4.- CAMPAÑAS DE EDUCACIÓN DE LA POBLACIÓN EN SALUD, PREVENCIÓN, NUTRICIÓN, REPRODUCCIÓN, MEDIO AMBIENTE, VIOLENCIA, ETC.

5.- POLÍTICA PARTICIPATIVA DE CUIDADO AMBIENTAL
Es necesario, ante los problemas ambientales por los que atraviesa nuestro municipio (contaminación río Rojas, Basurero a cielo abierto, riego artificial, feed lot, desecho fabriles, etc) que sea la población la que participe activamente en el cuidado del entorno en donde vive. Para lograrlo, se deben implementar amplios planes de educación, voluntariados escolares e información ambiental que formen a la ciudadanía en la defensa del ambiente, aprendiendo a detectar aquellos focos contaminantes o potencialmente peligrosos para la salud de la población, la flora y la fauna. Al mismo tiempo se debe comenzar con planes de reciclado de residuos sólidos urbanos en los domicilios como forma de reducir los volúmenes que se destinan al basurero a cielo abierto.

6.- INCLUSIÓN SOCIAL
Se debe terminar para siempre con el asistencialismo improductivo y denigrante de la persona humana, como así también la utilización de la asistencia con fines electorales. Cada tarea de gobierno en lo social debe estar orientada a lograr mayor inclusión, mediante la promoción del trabajo digno que a su vez dignifica al que lo produce.

7.- ROJAS UNA CIUDAD SEGURA
El resguardo de la niñez, adolescencia y su formación en los valores de la vida democrática son una de las principales medidas a tomar para evitar futuros adultos indiferentes a lo que pasa en su ciudad y en su barrio. La inclusión social de los jóvenes y la implementación de programas de prevención y contención evitan, además, un camino hacia la droga y la delincuencia juvenil, principales flagelos de la inseguridad instalada en la sociedad.
Se deben adaptar a nuestro distrito experiencias exitosas como la realizada en la ciudad de Rosario, basada en las propuestas del pedagogo italiano Francesco Tonucci, sobre la ciudad de los niños, incluyendo el consejo de niños y niñas, que vayan formando una actitud de vida socializada y democrática desde los primeros años de vida. Implementar un seguimiento y asistencia de los niños, desde su nacimiento hasta la adolescencia, en todo lo que hace a la formación integral, salud, educación, etc.

8.- POLÍTICAS DE SALUD DESCENTRALIZADAS
Priorizar los planes de prevención de las enfermedades. Creación y jerarquización de centros de salud barriales. Participación de todos los involucrados en la prestación de salud del municipio en la diagramación de las mejoras en las prestaciones.

9.- IGUALDAD Y TRABAJO.
Promoción de políticas públicas para: lograr una mayor igualdad, la revalorización del rol de la mujer en la sociedad, la aplicación de planes integrales de salud, la planificación familiar, la procreación responsable, la inserción laboral y combatir el trabajo en negro.

10.- TRANSPARENCIA, CIUDADANÍA Y DERECHO.
Es el espacio de participación ciudadana el que les permite a las personas opinar, sugerir, apoyar o criticar proyectos, licitaciones, contratos u obras públicas antes de su realización. También debe existir la protección a los ciudadanos de las decisiones del poder y de los errores de la administración municipal como el acceso a la información pública.

SUMATE, PODEMOS HACERLO

jueves, 17 de marzo de 2011

Este Martes pasado le entregaron a Rubén Giustiniani (Presidente del PS) el premio al mejor Senador de 2010

Rubén Giustiniani agradeció la distinción recibida y destacó que “también es una responsabilidad a futuro”. “Es un reconocimiento a una tarea, esfuerzo y dedicación en todo lo que significa el trabajo parlamentario en beneficio de todos los ciudadanos”, sostuvo el legislador que representa a la provincia de Santa Fe. Además extendió sus agradecimientos a su “hermosa familia, a mi maravilloso equipo de trabajo, de colaboradores y asesores, y a mi querido Partido Socialista”. Para finalizar expresó su compromiso por “continuar trabajando todos los días por los que menos tienen, por los jubilados y los pensionados, por los jóvenes, por el pueblo de mi provincia de Santa Fe, y por la Nación argentina”.

En los últimos 6 años, Giustiniani había sido electo dentro de los 10 legisladores más destacados por su tarea parlamentaria.

Junto a Giustiniani, diez diputados y otros tantos senadores del Congreso de la Nación recibieron este martes los Premios Parlamentario, reconocimiento que otorga la revista especializada “Semanario Parlamentario”. La elección se realiza a través de una encuesta que cada año realiza la publicación entre senadores, diputados, asesores y periodistas especializados.

Durante 2010, Giustiniani presentó 78 proyectos: 36 de Declaración, 23 Comunicación, 6 de Declaración y 13 de Ley. Se destacan el 82% Mínimo Vital y Móvil para los Jubilados y su posterior Consulta Popular; Declaración de Servicio Público a la Telefonía Móvil; Fondo Federal de Obras Publicas para Educación, Salud e Infraestructura Productiva; Proyecto de Resolución solicitando al Poder Ejecutivo el inmediato otorgamiento de la personería gremial a la CTA; entre otros.

También recibieron premios los medios y periodistas que a juicio de los votantes mejor cubrieron el desarrollo de la actividad legislativa a lo largo del año.

lunes, 7 de marzo de 2011

8 de Marzo: Feliz día a todas las Mujeres

Como todo 8 de Marzo, desde hace más de 100 años, recordamos a aquellas mujeres que fueron asesinadas, en una fábrica textil de Nueva York, por reclamar reducción a 10 horas diarias de trabajo.

Siempre las mujeres fueron las que dejaron huellas imborrables en la historia: fueron aquellas mujeres de la Revolución de Mayo que apoyaron y participaron incansablemente de aquel levantamiento popular cuando pasaba las horas más críticas; otras como Juana Manso que dedicó su vida a la traducción y creación de libros para la mejora de la Educación; Cecilia Grierson en la medicina, Juana Manuela Gorriti en la literatura argentina en conjunto a la gran poeta Alfonsina Storni, y Virginia Volten en el ámbito gremial, Mercedes Sosa en la música argentina y, como no mencionar, a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo en su incasable lucha por la Memoria, Verdad y Justicia. En nuestra ciudad no podemos dejar de nombrar a las Madres que crearon el Comedor “Carita de Ángel” ubicado en el barrio de Santa Rita. En el ámbito internacional no podemos dejar de destacar a mujeres como Emilia Pardo Bazán, Maria Curie, Dolores Ibárruri, Edith Piaf, Indira Gandhi, Rosa Luxemburgo, entre tantas otras.

Como Socialistas, y más en esta fecha, no podemos dejar de recordar a Alicia Moreau de Justo. Como muchos la definieran, fue “la revolucionaria más coherente de nuestra historia”. Fue pionera en las reivindicaciones por la mujer, mucho antes que cualquier otra mujer en la historia de la Argentina. Luchó por las reivindicaciones sociales y de las mujeres (como el voto femenino desde principios del Siglo XX), en las épocas donde la explotación y las desigualdades extremas eran realmente obscenas; a esto hay que agregarle que las mujeres eran denigradas y marginadas por los sectores conservadores y tradicionales de la Argentina. Esta lucha de Alicia con muchas mujeres que participaban en el Socialismo, fueron las que le dieron un sello distintivo al Partido Socialista. En una entrevista, donde le preguntaban sobre la participación de la mujer, ella respondía: “En los centros socialistas las mujeres siempre tuvieron iguales derechos que los hombres. Palacios presentó dos veces un proyecto para dar voto a la mujer, pero lo rechazaron. Los conservadores creían que si las mujeres votaban no iba a haber nadie que les hiciera el puchero y los esperara al mediodía”. Esta frase de Alicia Moreau de Justo sintetiza la idea de Igualdad llevada a la práctica por el Partido Socialista a lo largo de sus 114 años de historia.

Hoy en día, las y los Socialistas tenemos la responsabilidad de llevar adelante las reformas necesarias para garantizar ese pie de igualdad entre las mujeres y los hombres. Como marco el último censo nacional, hay 20.500.000 mujeres y 19.500.000 hombres, lo que nos indica que tenemos un millón más de razones para avanzar en la igualdad. Las mujeres argentinas, provenientes de distintos partidos y organizaciones sociales, se reúnen año a año en distintos lugares del país produciendo un movimiento masivo y difícil de igualar en los tiempos de hoy con la “excusa” de reclamar más igualdad y la implementación de políticas de género, lo que las transforma en un ejemplo a seguir.

Por eso, es inaceptable que en pleno Siglo XXI todavía sigamos viendo la discriminación que sufren las mujeres en el ámbito laboral en donde tienen menor remuneración por el mismo que trabajo que realiza un hombre y hasta menos oportunidades para conseguir empleo; la crueldad anacrónica con la violencia familiar y sexista que deja una mujer muerta cada tres días; la desigualdad expresada en el disparejo acceso a los ámbitos de decisión en la política; las miles de adolescentes que mueren en los hospitales de hemorragias indetenibles por abortos provocados; las cientos de mujeres que son introducidas en las redes de trata para su explotación, son temas prioritarios a combatir en una agenda progresista en la Argentina.

Para una mejor democracia, es necesario que las mujeres ocupen los lugares en donde se toman las decisiones que hoy en su inmensa mayoría están tomadas por varones. Por lo tanto es necesario una Ley Integral de Paridad para establecer que en los tres poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) se garantice una presencia igualitaria entre ambos sexos, promoviendo de esta manera la construcción de una sociedad más justa y sin discriminación para todas las mujeres y niñas. La igualdad de derechos y oportunidades entre mujeres y varones sin dudas nos hará transitar por un país más justo, igualitario y solidario para todas y todos los Argentinos.

jueves, 3 de marzo de 2011

La necesidad de un Frente Progresista en la Argentina

Empezamos el 2011 en momentos en que el mundo atraviesa una profunda crisis global, expresada fundamentalmente en una crisis económico-financiera, que tuvo su epicentro en los países del sur de Europa y los Estados Unidos, y de la que todavía no ha podido salir.

Crisis, que si tiene su origen en causas de diversa índole, encuentra su explicación en el crecimiento excesivo de las desigualdades. Fueron años, más bien décadas, de aplicación de políticas neoliberales que dejaron como consecuencia un mundo mucho más rico pero a la vez muchísimo más injusto. Un mundo donde resuenan con frecuencia los tambores de la guerra, y se desconocen y pisotean las decisiones de la comunidad internacional. Un mundo rico que discrimina y que aplica políticas xenófobas y racista hacia los ciudadanos del mundo pobre.

La desregulación global ha ido conjugando así una nueva división internacional del trabajo donde –como diría un observador europeo– China es la fábrica del mundo, India la oficina, América Latina la granja, Europa el hogar de ancianos y Estados Unidos el cuartel.

El siglo XXI abre entonces un gran debate en el seno de la izquierda: ¿Qué Estado?, ¿Qué gobierno?, ¿Qué política?, ¿Qué economía?, y ¿Qué sociedad?

El liberalismo dejó siempre a los socialistas la tarea de fabricar utopías, y el socialismo debió a esa actividad utópica o utopizante gran parte de su vigor y de su dinamismo histórico. En la mayor parte de Europa, gran parte de todo ello se encuentra perdido o apagado.


El Siglo XX también nos enseñó con la caída del Muro, que cuando el socialismo fue “real” murió, y que cuando se transformó en imperialismo desarrolló su autonegación. Lo que uso en cuestión la crisis del llamado “socialismo real” que hizo eclosión con la caída del Muro de Berlín, fue precisamente un “modelo de socialismo” – basado en la centralización estatalista, burocrática y autoritaria – que en realidad nunca fue tal. Se trató de una concepción que negaba la democracia, en tanto y en cuanto sacrificaba la libertad en aras de la igualdad. El fracaso de ese modelo demostró que cuando se sacrifica la libertad, también se pierde la igualdad. La relación entre socialismo y democracia es de carácter indisoluble: no hay socialismo sin democracia.

Este siglo terrible, donde murieron por la acción humana más de 200 millones de personas producto de guerras, dictaduras y totalitarismos demostró que la supuesta ineluctabilidad del Socialismo no se plasmó de acuerdo a las predicciones de Marx. Pero al mismo tiempo ha ido demostrando que tampoco puede afirmarse la ineluctabilidad del mercado.

¿Cómo serían entonces la economía y la sociedad dentro de cien años? No lo sabemos, lo que sí sabemos es que depende de la mano del hombre, es decir, de cada uno de nosotros mismo. El hombre será el artífice de su propio destino.

Entramos así en el siglo XXI con la proclamación reiterada del triunfo de la democracia, pero con la constatación de las dificultades crecientes para cumplir sus principios fundantes. Hasta hace muy poco, se intentó simplificar la interpretación del pasado y del presente hablando del futuro como fin de la historia, proclamándose el pretendido triunfo definitivo de la ideología del mercado y de la democracia liberal en el mundo. Democracia liberal basada en una concepción meramente procedimental, que ha obturado la dimensión participativa y deliberativa de la vida política, reduciendo así la noción de ciudadanía exclusivamente a la faz electoral.

Unir democracia y mercado no tiene entonces base científica, son dos proposiciones contradictorias. Mientras el mercado se desarrolla en la desigualdad, que es su “motor”, la democracia, con la premisa “un hombre un voto”, camina en la igualdad.


Oscar Wilde escribió cien años antes de Stalin que un socialismo autoritario no serviría de nada. Es lamentable que una parte de nuestra comunidad deba estar prácticamente en la esclavitud, pero es infantil resolver este problema esclavizando. Y terminaba afirmando Wilde que la desobediencia, a ojos de cualquiera que ha leído la historia, es la virtud original del hombre. El progreso se hizo a través de la desobediencia.

Por todo ello hoy América Latina abre un debate interesante, porque son los de abajo, después de tantas décadas de explotación, los que se expresan votando y apoyando a gobiernos que intentan ir en línea con sus demandas, abriendo nuevas experiencias en la región. Como lo hacen Evo Morales en Bolivia; Lula y, ahora, Dilma en Brasil; "Pepe" Mujica en Uruguay; Correa en Ecuador.

Y el Bicentenario debe ser en este sentido una buena oportunidad para realizar una reflexión. Una sociedad progresista no es sustentable en el tiempo sino se la construye desde abajo hacia arriba. No hay ningún Emperador Caracalla o iluminado que otorgue ciudadanía a todos sus súbditos. Lo verdaderamente revolucionario es liberar la participación. Debemos luchar para extender la idea que la participación ciudadana puede, y debe, ir mucho más allá que el voto. La democracia no es sólo un procedimiento, sino una ambición ética y una pasión por la igualdad y la libertad. La democracia, como experiencia humana ligada a las luchas históricas por la igualdad, libertad y justicia social, es una experiencia siempre inacabada que se construye día a día. Los trágicos finales de muchos gobiernos populares en las últimas décadas, son la cruda evidencia de que esto no es una pose, no son meras palabras. Por ello, el Socialismo debe plantearse como horizonte la construcción una Democracia de Nuevas Bases.

De cara al proceso electoral que tenemos este año es oportuno volver a plantear – como lo hicimos con los 10 Puntos Programáticos que entregamos a las fuerzas políticas amigas – que no hay nueva política ni verdadero cambio progresista:

1. Sin Reformas tributarias que reviertan la profunda regresividad del sistema. Deben pagar más lo que más tienen y más ganan, no como sucede hasta hoy con un sistema asentado en el impuesto indirecto al consumo. El combate a la pobreza sólo será efectivo con una profunda reforma tributaria. Y no se trata sólo de ayudar a los pobres, sino de fundar un nuevo contrato social como base para achicar las brechas de desigualdad.
2. Sin reformas provisionales que garanticen un sistema de previsión social integral, digno, justo y solidario. El 82% del Salario Mínimo, Vital y Móvil como piso de inclusión, la reconstrucción de la pirámide previsional a través del cumplimiento del fallo Badaro, y un ingreso universal a todos quienes no accedan a ningún tipo de jubilación, deben ser los ejes de esta política.
3. Sin políticas sociales universales que rompan los mecanismos clientelares de las políticas focalizadas que consolidan la exclusión. Por lo tanto, la universalización por ley de la Asignación por Hijo es una necesidad imprescindible.
4. Sin una nueva política en relación a los servicios públicos que garantice el acceso universal a los servicios esenciales. El funcionamiento de los entes de control a las empresas concesionadas y al Estado, las audiencias públicas que garanticen tarifas justas y razonables, y la implementación de la tarifa social a los sectores populares.
5. Sin reformas educativas que reviertan la concepción economicista de la educación a través de una nueva Ley de Educación Superior.
6. Sin reformas en el sistema de salud, que permitan garantizar la accesibilidad, la equidad y la calidad en la atención integral de la salud a todos los habitantes del territorio nacional.
7. Sin reformas políticas que garanticen el mejoramiento de la calidad institucional, promuevan una mayor participación ciudadana, garanticen un papel creciente del Parlamento superando el hiperpresidencialismo, y una justicia eficaz e independiente.
8. Sin reformas laborales que promuevan la generación de empleo digno y de calidad, y la participación de los trabajadores en la marcha de las empresas.
9. Sin una reforma del sistema financiero que permita brindar apoyo y asistencia a la actividad productiva, a las familias, a las PYMES, a las entidades de la economía social, y a los sectores productivos más postergados del interior del país.
10. Sin una política de preservación del medio ambiente que permita un uso racional de nuestros recursos materiales en el marco de un desarrollo sostenible. Un nuevo Código de Minería que permita un mayor control de la explotación y una mayor participación estatal en las rentabilidades, y la recuperación de la renta hidracurburífera para el Estado argentino, son dos de los ejes centrales de esta política.

Una Democracia de Nuevas Bases sintetiza el desafío democrático actual. Una democracia que conjugue calidad institucional con justicia social y distributiva. Una democracia que recupere la visión perdida de la democracia como gobierno del pueblo. Y para ello, es imprescindible recuperar como utopía el ideal del autogobierno y la democracia directa.

Y, ¿Con quién recorreremos ese camino?

Indudablemente, con un Frente Progresista que exprese las demandas populares de distribución del ingreso y mejora de la calidad institucional. El Partido Socialista entiende que este Frente a partir en primer lugar desde las coincidencias programáticas, es por ello que se reunió con la Unión Cívica Radical, Proyecto Sur, GEN y Unión Popular para entregarles los 10 puntos programáticos que representan un punto de partida fundamental de coincidencias progresistas.

Y el segundo punto de partida es el establecimiento de pautas de funcionamiento democrático de ese espacio. Un Frente funciona democráticamente cuando todos sus integrantes a través de sus partidos participan en la forma de decisiones y en la gestión de gobierno. Esa es la garantía del cumplimiento de los compromisos programáticos asumidos y el contrapeso de los liderazgos de popularidad coyunturales.

Hoy los socialistas sabemos más, y hoy somos muchos más que ayer. Los 114 años de historia de nuestra organización política son la evocación de una historia que nos enorgullece, desde Juan B. Justo, Alfredo Palacios y Alicia Moreau hasta Guillermo Estévez Boero y Alfredo Bravo, toda una generación de socialistas que nos transmitieron con su ejemplo los ideales de Igualdad, Libertad y Solidaridad. Pero sabemos que, pese a todo el acervo histórico que tenemos detrás, es mucho más importante lo que tenemos por delante.


El Partido Socialista es el partido de las mujeres y los hombres que a lo largo y ancho del país sueñan con una sociedad más democrática, justa y libre. Una organización que debe ser abierta, transparente, movilizadora y sensible a los anhelos y las aspiraciones ciudadanas.

Una organización para los militantes y simpatizantes y para todos los ciudadanos que creen y trabajan por un país distinto. Un canal de expresión de las ideas progresistas en la República Argentina.

Un partido que quiere hacer viables los sueños y esperanzas de aquellos ciudadanos y ciudadanas que desean un futuro distinto, un futuro mejor. Un futuro que sólo será posible si lo imaginamos ya desde el presente, sumando ideas y voluntades para tratar los temas fundamentalmente de una agenda progresista.


Un partido con vocación de mayorías, que gobierna hace 20 años en Rosario, y que desarrolla su acción legislativa en Concejos Deliberantes, Legislaturas provinciales y en el Congreso de la Nación, que ha llegado a su más alta expresión política gobernando por primera vez una provincia argentina como Santa Fe. Un partido que desde la acción práctica de la política ha demostrado que se puede gobernar con honestidad y solidaridad.

Un partido que cree que es necesario construir un Frente Progresista basado en un consistente acuerdo programático, y que tenga como eje el desarrollo integras del país y la profundización de la democracia en todos sus frentes.

El gran reto es entonces enriquecer nuestro proyecto político a través de la pluralidad y la participación, abrirlo a la sociedad, sumar más voluntades y aumentar el compromiso de más ciudadanos y ciudadanas con el proyecto de cambio y con los valores y principios que encarna nuestra organización ya más que centenaria.

El Partido Socialista quiere convertirse en cause de las ideas progresistas en la República Argentina. Y en ese camino es imprescindible institucionalizar un espacio programático de coincidencias progresistas con todos los sectores políticos y sociales que comparten nuestra visión de país.


Por ello a la vez que continuaremos en el camino de construcción de ese gran Partido Socialista que todas y todos anhelamos, queremos ser artífices de la construcción de un Frente Progresista en la Argentina que, en base a un programa de centro-izquierda, integre a aquellas organizaciones políticas y sociales que expresan propuestas alternativas al proyecto hegemónico del oficialismo y alejadas de las alianzas de derecha.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Desde el Socialismo rechazamos la utilización de 4 MIL MILLONES DE PESOS, pertenecientes al fondo de l@s jubilados, para la emisión de deuda pública

En el último boletín oficial del Gobierno Nacional, entre sus publicaciones estaba el uso de 4 MIL MILLONES DE PESOS para la emisión de una Letra del Tesoro por U$S 800.362.000 y en la otra por U$S 125.707.000. Paradojamente, esta decisión fue tomada por las resoluciones 365/10 y 106/10 el 20 de diciembre pasado, y publicadas en el Boletín oficial el 10 de febrero, 52 días después.

Por su parte, Rubén Giustiniani (Presidente del Partido Socialista y Senador Nacional) quien es impulsor del Proyecto de Consulta Popular por el 82% Mínimo, Vital y Móvil expresó: “nuestros jubilados quizás no entiendan de Letras del Tesoro, suscripción directa y amortizaciones, pero si tienen plena conciencia que trabajaron y aportaron honestamente durante toda la vida y hoy reciben una jubilación que no cubre sus necesidades mínimas”. El gobierno nacional hace pocos días anunció un aumento de los haberes previsionales que representan “6 pesos por día” estimó Giustiniani.

Seguimos sosteniendo que es una paradoja tener una “ANSES Rica, con Jubiladas y Jubilados Pobres”

En los últimos meses del año pasado, en la discusión del 82% Móvil para las jubilaciones, escuchábamos al Kirchnerismo decir que llevar los haberes a ese número de justicia social era imposible, ya que era prácticamente desfinanciar el Estado. Ahora entendemos por qué decían eso, hace unos días atrás en el boletín oficial del Gobierno de la Nación salió la utilización de 4 MIL MILLONES DE PESOS para la compra de deuda pública, pero la trampa de esta resolución radica en que este dinero fue tomado “por prestado” en Diciembre de 2010, ó sea que nos enteramos 52 días después.

Desde el Partido Socialista hemos apoyado y nos parece una excelente medida la estatización de las AFJP, porque el Estado no puede dejar en la mano de un grupo privado, al cual solo le interesa lucrar, las jubilaciones y pensiones de miles y miles de abuelas y abuelos argentinos. Pero este Estado, conducido hoy en día por el Kirchnerismo, ha demostrado usar tendenciosa y corruptamente los fondos de la ANSES.

Esta no es la primera vez que el Gobierno se financia a través de los fondos de las y los jubilados, en esta “vuelta” para cubrir parte del déficit del Tesoro Nacional. A todo esto, el Kirchnerismo sigue persistiendo en la estrategia de “tomar prestado” una cifra cercana a los 100 MIL MILLONES DE PESOS, de los 170 mil millones que tiene el Fondo de Garantía y Sustentabilidad pertenecientes al sistema de jubilaciones del ANSES. Entonces, mientras el Gobierno Nacional logra financiarse a tasas bajas y poniendo irresponsablemente en riesgo la sustentabilidad del Sistema Previsional, se niega a cumplir con la obligación de pagar los haberes del 80% de las y los jubilados de acuerdo a lo que marca la legislación previsional, ratificada por los fallos de la Corte Suprema. Todo esto indica que las prioridades del Gobierno son en primer lugar financiar los gastos que vienen teniendo, y después viene el bienestar de nuestras jubiladas y jubilados.

Los números para el 2011 marcan que la ANSES va a tener un presupuesto de $ 162.220 millones, de los cuales aproximadamente, unos $ 50.000 millones (35%) corresponden a gastos y prestaciones que deberían tener financiamiento propio en lugar de utilizar recursos que pertenecen a nuestros mayores. Como dijo Rubén Giustiniani, y nosotros reproducimos al principio de esta nota, “nuestros jubilados quizás no entiendan de Letras del Tesoro, suscripción directa y amortizaciones, pero si tienen plena conciencia que trabajaron y aportaron honestamente durante toda la vida y hoy reciben una jubilación que no cubre sus necesidades mínimas”. Esto demuestra que realmente no hay cajas revolucionarias, de pedir plata para la corona diciendo que “se va a hacer la revolución”, esto es usar los fondos públicos de manera corrupta para tapar baches que este “modelo” deja día a día; esto de nueva política no tiene nada, es muy viejo. Por eso desde el Socialismo siempre planteamos que la decencia, honestidad y transparencia son los primeros valores de un progresismo en la Argentina.

Como dijimos en su momento, esto no es un capricho. Esto es llevar a un piso de Justicia Social para nuestras jubiladas y jubilados, que trabajaron toda su vida para que hoy en día tengan las migajas que tienen, y encima el dinero que aportan las y los trabajadores sean usados para mantener un modelo que sigue generando desigualdades entre los que más tienen y los que menos tienen. Tampoco es una jugada política, son 20 años de reclamo marchando a la vuelta del Congreso de la Nación, en las calles Callao y Rivadavia, para que el 82% Mínimo, Vital y Móvil sea tratado. El 82% no solo trae un beneficio para el sector pasivo, sino que pone en pie de discusión de cómo hacemos para combatir el trabajo en negro, que es el que más ha crecido en el país en estos últimos años. Pareciera que el mensaje que nos deja el Kirchnerismo es que ser jubilado es sinónimo a ser pobre, y a las y los trabajadores los invita a pensar que el descenso social caracterizan su porvenir en la Argentina. Es por eso, que la sanción de 82% Mínimo, Vital y Móvil y el combate al trabajo en negro son los temas de agenda que tiene que tener una fuerza progresista para empezar a construir un camino de Justicia Social, Igualdad y Solidaridad que lleven el bienestar a todas y todos los argentinos.

jueves, 17 de febrero de 2011

Las reKolectoras en la Viveza Criolla

Como escribíamos hace un par de notas atrás, en donde hablamos sobre la Reforma Política y los daños que empezaba a generar en nuestra democracia, ahora vemos otro tema que surgió: las listas colectoras.

Las colectoras son cuando una lista a candidato a Gobernador, Presidente o la boleta de mayor “rango” en las listas sábanas, adosa con distintas listas más abajo. Ósea que, por ejemplo, la boleta de mayor “rango” (presidente o gobernador) tiene dos o más candidatos a nivel municipal; paso en nuestra ciudad en las últimas elecciones ejecutivas cuando el Frente para la Victoria encabezado por “Chano” Aloe y la Agrupación Vecinal “26 de Octubre” que llevaba como candidato a Intendente a Martín Caso, adosaron a nivel nacional con Cristina Fernández de Kirchner para generar de esta manera tracción de votos a nivel nacional.

Hoy en día con la Reforma Política, la cual instaura las “Internas Simultáneas y Obligatorias” como primer escalón, poner colectoras es engañar al Electorado. Es una parte más de la denominada Política Criolla, en donde el Partido Justicialista siempre ha usado esa “viveza” a su favor. Viveza que radica en engañar al electorado, esconder boletas los días de elección, el viejo y conocido voto cadena, entre tantas cosas y, lo que es peor, que esta nueva Ley no combate, sino que pareciera que sigue ayudando a que pase esto.

Desde el Socialismo, cuando se presentó esta Ley, dijimos en su momento que en ninguna parte de la ley decía que se “abolían” las listas colectoras, cuando el Kirchnerismo decía todo lo contrario. Nunca se contemplaron avances en lo que se refiere a la dinámica electoral, a la transparencia, porque esta Ley desde su esencia es monocolor y a medida del Partido Justicialista para perpetuarse e enquistarse en el poder.

Una Ley Electoral por sobre todo, tiene que tener dos partes fundamentales: la primera es el Consenso entre todas las fuerzas políticas porque no tenemos que olvidar que vivimos en una democracia que significa la libre expresión de todas las ideas políticas. La segunda es la Transparencia que es lo que tiene que tener como base cualquier elección para garantizar la igualdad entre todas las expresiones y para no quebrantar y traicionar la libre expresión popular, a través de las Vivezas Criollas.

Y un claro ejemplo de transparencia va a ser la Boleta Única cuando se ponga en marcha en las Internas Abiertas del 22 de Mayo en la provincia de Santa Fe. Este sistema, que fue implementado por el Partido Socialista y el Frente Progresista, garantiza transparencia, dinámica y “corta de cuajo” con todos los métodos tradicionales de viveza. La Boleta Única consiste en que cada claustro (ósea en Gobernador, Diputados y Senadores Provinciales, Intendentes, Concejales) tenga su propia boleta separada al resto (eliminando la lista sábana) y que en cada una de ellas aparezcan todos los candidatos con la foto de ellos al lado del nombre, y así el ciudadano que vote tenga que marcar con una cruz al lado del candidato que encabece la lista. Esto así planteado elimina la listas sábanas (como ya mencionamos); corta con el voto cadena porque las boletas están disponibles solo cuando se abren los comicios lo que no permite repartir votos ni antes ni durante la elección; suprime la “tracción” de votos de arriba hacia abajo o viceversa, generado por las famosas “colectoras”; no se van a poder esconder o robar votos como pasa ya que hay una sola boleta con todos los candidatos por claustro.

A nivel nacional a través de nuestro Senador, Rubén Giustiniani, hemos presentado y acompañado esta propuesta, este método de elección y transparencia, que este año va a tomar estado parlamentario para ser tratado. Esperemos que tenga sanción para que se eliminen todos los métodos de viveza implementados por el PJ, para que la trampa se deje a un lado y que desde una vez, la transparencia gane terreno para construir un camino cierto de Igualdad y Justicia para todas y todos.

domingo, 6 de febrero de 2011

Refundar el capitalismo, aquel chiste de Obama

Cuando estalló la actual crisis económica y se hicieron evidentes sus causas y la rapacidad de quienes se habían beneficiado de ella, cualquier analista con dos dedos de frente, incluso los que habían participado en la orgía especulativa en la que se gestó, comprendió que no era en los errores o los delitos de agentes económicos donde radicaba la responsabilidad principal sobre lo que estaba pasando, sino en el propio sistema.

La mayoría de los dirigentes políticos aunque no todos tenían esos dos dedos de frente, y lo comprendieron también. Los menos atrevidos lo dijeron en voz baja; pero algunos de los más poderosos como Obama y Sarkozy no tuvieron inconveniente en decirlo en voz alta, y al calor de la indignación que les producía el espectáculo se olvidaron de reprimir la lengua. "Hay que refundar el sistema", fue la consigna que transmitieron. Eso quería decir y lo dijeron también: hay que terminar con la desregulación de los mercados; hay que controlar la proliferación de un capitalismo financiero basado en la especulación con activos ficticios que multiplican exponencialmente la economía real, se adueñan de ella, la pervierten y la arruinan; hay que imponer tasas a las transacciones financieras y a los beneficios especulativos; hay que acabar con los paraísos fiscales; hay que poner coto a la codicia de los administradores y evitar que persigan su propio beneficio como único criterio de gestión; hay que recuperar la intervención pública en la economía, tanto para los estados como para los organismos internacionales; hay que imponer códigos de conducta ética a los agentes económicos etcétera, etcétera.

Los límites del sistema


Lo que ha pasado luego parece la clase práctica de un curso básico de marxismo. La clase en la que se aprende, con ejemplos prácticos, cuáles son los límites del sistema y quién manda realmente aquí.

¿Eran cínicos Obama y Sarkozy cuando proclamaron su convicción en que había que refundar el sistema y su decisión de hacerlo? No creemos. Como Zapatero y otros políticos europeos que creyeron que esa refundación era posible y se sumaron a ello, todos ignoraron, por un momento, los límites del sistema y la correlación de fuerzas que determina quién manda realmente en él.

Aparentemente son las multinacionales quienes protagonizan el capitalismo moderno. Según un documento reciente de la OMC, las 500 mayores controlan más del 70% del comercio mundial. Pero quien manda en ellas, en la mayoría de los casos, son los capitales financieros: hedge funds (fondos de cobertura), sociedades de capital riesgo, fondos de pensiones, fondos soberanos y otros capitales especulativos, muchos estrechamente vinculados a los bancos y a las grandes fortunas.

De las decisiones que tomen estos capitales dependen la estabilidad de las divisas, las deudas de los estados y las fluctuaciones de los precios internacionales de todos los productos estratégicos y de consumo básico. De esas decisiones depende que las divisas se deprecien o se aprecien con independencia de su economía real, que los estados quiebren o tengan que dejar de prestar servicios públicos y someter a su población a drásticos programas de austeridad, que se hunda el valor de las exportaciones de unos países o que se multiplique el precio de productos básicos de los que depende la alimentación de cientos de millones de personas. Son esos capitales quienes mandan. Las organizaciones económicas internacionales están a su servicio y marcan al mundo las políticas que a ellos convienen. Y los estados, dentro del sistema, no pueden nada frente a su poder: tanto a su poder económico, que podría hundir la economía de cualquier país, como a su capacidad para comprar voluntades políticas, medios de comunicación, instituciones y grupos de presión que manipulen según sus intereses a parlamentos y opiniones públicas. Esto, en cuanto a la correlación de fuerzas, es decir, a la cuestión de quién manda aquí.

La búsqueda del beneficio

Pero si ponemos entre paréntesis ese aspecto decisivo, y nos preguntamos si sería posible refundar el sistema de modo que se evitasen las crisis y se moralizase la economía, nos topamos enseguida con límites infranqueables, porque son los límites del propio sistema. Como saben hasta los niños, la clave del sistema capitalista es el beneficio privado; todo el sistema se asienta en la valorización de los capitales. Cada uno tratará de obtener de la aplicación de su capital el máximo beneficio posible e irá a buscar ese beneficio allá donde se pueda encontrar, con independencia de las consecuencias sociales que de ello deriven. No puede actuar de otra manera, porque compite con los demás capitales que actúan con el mismo criterio, y sus accionistas le reclamarán que los beneficios estén a la altura de los que consiguen los demás.

Hace ya mucho tiempo que el capital financiero dejó de ser un mecanismo auxiliar en la arquitectura del sistema capitalista, necesario para facilitar la circulación y la asignación de los capitales en la producción de bienes y servicios. Desde hace más de un siglo es la pieza clave del sistema. Desde los años noventa, en EEUU, los beneficios del sector financiero superan a los de toda la industria. Desde hace décadas las finanzas son el principal protagonista, el que ha configurado todo el sistema según su conveniencia y el que domina por completo el conjunto. Hoy el sistema capitalista es el sistema de las finanzas internacionales y sus estructuras lo vertebran. No hay más sistema capitalista que este.

Volvamos a Obama y Sarkozy. Lo que pasó después es bien conocido, aunque quizás no haya sido bien expresado. Los mercados se impusieron a los gobiernos, se dice. Pero los mercados es un eufemismo tras el que se amparan aunque no se oculten las finanzas internacionales. No son los mercados básicos de cualquier economía mercantil, en los que concurre la oferta y la demanda de bienes y servicios, ni siquiera el mercado de capitales que asiste a la economía real en su funcionamiento. Son exclusivamente los mercados financieros en los que se trafica con divisas, con deuda pública y, sobre todo, con derivados que multiplican ad infinitum obligaciones y beneficios futuros convertidos en títulos que se crean exclusivamente para especular con ellos.

Los grandes capitales que operan en estos mercados no compran ni venden activos reales, sino la oportunidad de beneficios que se lograrán manipulando su oferta o su demanda, mediante operaciones que subirán o bajarán artificialmente el precio según convenga. Cómo se hace esto no es tema para este artículo. La cuestión es que se hace. Y vaya si se hace. El año pasado las transacciones financieras fuera de los mercados (OTC) se elevaron a 615 billones de dólares, más del triple de la riqueza del mundo entero y unas diez veces el PIB mundial. Y los activos de las 50 mayores corporaciones financieras transnacionales sumaban 54 billones de dólares, triplicando el PIB de toda la UE.

Fin de fiesta

Fueron los grandes capitales financieros internacionales directamente o a través de organismos que representan sus intereses y aplican sus criterios, como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial o el Banco Europeo los que recordaron a los gobernantes los límites de su poder.

En el segundo trimestre del año pasado, en Europa, intervinieron en la verbena de los políticos y se acabó la fiesta. Primero habían forzado a los gobiernos a gastar sin tasa el dinero del pueblo en su beneficio, porque no podían permitir la quiebra del sistema financiero a la que ellos nos habían conducido, permitiéndoles a la vez largar todo lo que quisieran sobre lo que harían después. Y luego, cuando se recuperaron los grandes beneficios y el negocio as usual, mandaron callar y ordenaron a los gobiernos que pusieran a la población firmes, le vaciaran sus bolsillos y le ajustaran el cinturón. Siempre, claro está, a través de la voz ventrílocua de los mercados.

Cómo va a quedar esto, lo veremos. Probablemente, con retoques cosméticos o sin ellos, entraremos en una nueva fase, sin nada que se parezca a una refundación del sistema o a una moralización de la economía. El sistema no se puede moralizar ni refundar; o se cambia o se sufre.