
Alicia Moreau, quien fue militante de nuestro Partido Socialista nació un 11 de octubre de 1885; hija de padres militantes que participaban de los círculos obrero en donde Alicia los solía acompañar. Estas pequeñas participaciones de Alicia, la llevaron a crear en 1900 el Movimiento Feminista en la Argentina y, un par de años más tarde, el primer Centro Socialista Femenino en la Argentina. Además, desde el Congreso del Partido Socialista fundó el Comité Pro-Sufragio Femenino. Por otro lado, Alicia también tenía su lado intelectual: durante años se encargó de la redacción de La Vanguardia (diario del Partido Socialista, que todavía sigue saliendo) dándole una mirada femenina a la política y durante un período escribió en la revista socialista de Enrique del Valle Iberlucea. Algunos de sus títulos fueron: La escuela nueva, La Comuna y la educación, Liga Internacional para la educación racional de la infancia, Internacionalismo escolar, Las universidades populares de Noruega; en 1946 escribe su libro más importante titulado “La mujer en Democracia”. También en ese período, junto a un grupo de mujeres, es la que inspira a Alfredo Palacios en llevar al Congreso, por primera vez en la historia, la temática de la mujer y el voto femenino.
En 1907 ingresó a la Facultad de Medicina de la UBA junto a seis mujeres que por primera vez se anotaban a estudiar medicina ya que la sociedad de aquel entonces veía mal que las mujeres puedan estudiar y desarrollarse igual o mejor, en algunos casos, que el hombre. Durante sus años de estudiante, Alicia estudio muy de cerca las enfermedades sociales relacionadas con la discriminación de la mujer y de los trabajadores; se graduó en 1913 con diploma de honor y fue la primera médica en América Latina en especializarse en enfermedades femeninas.
Después de varios años de estudio y de lucha por los derechos de las mujeres, en 1921 se afilia al Partido Socialista y, al año siguiente, se casa con el fundador del mismo, Juan B. Justo. A los pocos años integró el Comité Ejecutivo del Partido Socialista y, de esta manera, se convierte en la primera mujer en ocupar un cargo político. Y desde ese cargo, organizó exitosamente las “Agrupaciones Femeninas” en cada Centro Socialista logrando diferenciar al PS por la gran cantidad de mujeres que militaban en sus filas. En 1925 y 1926 junto a las feministas argentinas obtienen dos triunfos: la reglamentación del trabajo tanto para niños como para y mujeres (establecía que las mujeres no podrían trabajar más de 8 horas diarias y 48 horas semanales), y luego la igualdad de Derechos Civiles de la Mujer que establecía el principio de que las mujeres y los hombres debían ser equiparados en términos de derechos.
Fue precursora de la paz mundial en las dos Guerras Mundiales, y se solidarizó con el pueblo español durante su guerra civil. En 1947 apoyó, a pesar de sus diferencias con el Peronismo, la ley de voto femenino y la nueva Constitución Nacional en 1949 donde se establecía la plena igualdad entre la mujer y el hombre. Llegó a respetar mucho a Eva Perón, a pesar de sus críticas hacia ella, ya que luchó por lo mismo que ella venía peleando durante 40 años.
En 1951 fue candidata a Diputa Nacional por el PS junto a otras mujeres, y paradojamente no pudo votar ya que fue secuestrada y detenida por el Gobierno peronista, por lo que se tuvo que esconder luego de ser liberada. En ese período, junto a otras mujeres y figuras (como Alfredo Palacios) fueron perseguidos y arrestados por formar parte de la oposición. En 1956 fue elegida directora de La Vanguardia hasta 1960. En la década del 70, más precisamente durante el último Golpe de Estado, creó junto a otras personas la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos en donde apoya a las Madres de Plaza de Mayo. En 1981 propone, clandestinamente, la unificación del Partido Socialista y en 1982 es una de las pocas dirigentes políticas que se opone a la Guerra de Malvinas. Muere en 1986, a los 100 años de vida; un año más tarde la Ciudad de Buenos Aires la nombra Ciudadana Ilustre y la homenajea poniéndole su nombre a una de las avenidas más importantes de la Ciudad.
Por ahí, este articulo queda chico y, seguramente, nos faltaron detalles sobre la vida y obra de Alicia Moreau de Justo. En síntesis, Alicia fue una mujer que luchó a través de su militancia por la igualdad de derechos entre la mujer y el hombre, la solidaridad y la paz, siempre con una mirada joven y crítica. En este caso se cumple aquella frase de que "La juventud es algo más que una etapa de la vida, es una actitud mental frente a ella", una mujer que predicó con su ejemplo por sobre todo y nos enseñó que hay que luchar por lo que queremos. Este es el pequeño homenaje, en conmemoración a 125 años de su nacimiento, que le queremos rendir a una de las mujeres que fue prócer en nuestro partido y una persona de “vanguardia”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario